Estudio comparativo de los modelos de estimación de riesgo cardiovascular para la población española

  1. ARTACHO RODRIGUEZ, MIGUEL ANGEL
Dirigida por:
  1. Jesús Millán Núñez-Cortés Director/a

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 05 de julio de 2017

Tribunal:
  1. Elpidio Miguel Calvo Manuel Presidente/a
  2. Antonio Muiño Míguez Secretario/a
  3. Felipe Lucena Marotta Vocal
  4. Rocío Toro Cebada Vocal
  5. José Vicente Fernández Montero Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Introducción: Las enfermedades cardiovasculares continúan liderando las causas por mortalidad en nuestro medio y son una importante fuente de morbilidad para la población, constituyendo un importante problema de Salud Pública. A pesar de la disponibilidad de herramientas de cribado para la estimación del riesgo cardiovascular individual que faciliten a los profesionales de la salud la toma de decisión en intervenciones preventivas sobre la salud cardiovascular, hoy en día persisten dudas acerca de la eficacia de cada herramienta aplicada sobre distintas poblaciones. De ello se dirime la relevancia de disponer de un modelo lo más efectivo posible para estratificar a los individuos según su riesgo cardiovascular individual. Esta razón nos obliga a estudiar y analizar las diferentes opciones disponibles para conocer el grado de concordancia o discordancia entre ellas aplicadas a una misma población. Material y Métodos: Realizamos un estudio descriptivo transversal sobre población general con selección de la muestra en un recinto ferial en el año 2008. Se seleccionaron un total de 653 personas por muestreo por conveniencia, de las que finalmente se incluyeron a 493 personas sin enfermedad cardiovascular (ECV) en el análisis. La edad no fue criterio de exclusión. Se estudió la prevalencia de los factores de riesgo cardiovascular, así como de las enfermedades cardiovasculares: cardiopatía isquémica (ECor), enfermedad cerebrovascular (ACV) y arteriopatía periférica (EAP). Se estimó el riesgo cardiovascular por los modelos de Framingham-Wilson, SCORE para países de bajo riesgo, REGICOR y DORICA. Se analizó la asociación entre los diferentes modelos (correlación de Spearman), así como la concordancia (conjunta y por pares mediante el índice kappa de Fleiss y el índice kappa de Cohen, respectivamente) entre los distintos modelos. Resultados: La mediana de edad de la población fue de 54,5 años cumplidos corregidos. El 62,3% de la población presentó algún grado de obesidad (incluido sobrepeso), sin encontrar personas con desnutrición. El 14,8% era fumadora y el 5,9% diabética. La HTA y DLP fue conocida por el 20,7% y 31,7% de la población, respectivamente. La prevalencia de enfermedad cardiovascular en la población seleccionada inicialmente fue del 20,7%, siendo la más prevalente la EAP, seguida de la ECor y el ACV con proporciones del 12,2%, 9,7% y 3,2%, respectivamente. El riesgo cardiovascular medio estimados por los diferentes modelos correspondió al estrato bajo. DORICA fue la que obtuvo mayor prevalencia de riesgo moderado (49,3%). La mejor correlación se muestra entre las tablas de riesgo de REGICOR y DORICA (Rho = 0,955) y la peor entre Framingham y SCORE (Rho = 0,755). La concordancia conjunta entre los modelos fue buena (k = 0,463), presentando diferencias al analizar por pares. La mejor concordancia se obtuvo entre Framingham y REGICOR (k = 0,585) en la población no diabética, mientras que fue entre DORICA y REGICOR para la población diabética siendo tal concordancia excelente (k = 0,848). Conclusiones: Los resultados obtenidos confirman la alta prevalencia de factores de riesgo cardiovascular en la población española, así como de manifestaciones cardiovasculares. Ello justifica plenamente la necesidad de encontrar elementos predictores del nivel de riesgo de la población, a fin de adecuar las intervenciones a dicho nivel de riesgo, que habrá de ser estimado por una herramienta lo suficientemente adecuada a la población a la que se aplique. Dada la alta correlación entre los modelos españoles, así como la concordancia excelente en la población diabética, es preciso señalar las ventajas de emplear instrumentos para calcular el riesgo cardiovascular que proceden de la misma población a la que se le van a aplicar.