Derecho a la educación y ciudadanía democráticadel individualismo liberal al hombre cívico

  1. GONZÁLEZ IBÁÑEZ, JOAQUÍN
Dirigida por:
  1. Pablo Lucas Verdú Director/a

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 20 de septiembre de 2002

Tribunal:
  1. José Iturmendi Morales Presidente/a
  2. Pedro de Vega García Secretario/a
  3. Eloy García López Vocal
  4. Raúl Morodo Leoncio Vocal
  5. Enrique Lucas Murillo de la Cueva Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 88205 DIALNET

Resumen

La tesis doctoral Derecho a la educación y ciudadanía democrática: del individualismo liberal al hombre cívico realiza una aproximación a la relación histórica entre el poder político, y el poder de la educación desde el inicio del Estado moderno. Analiza el aporte educativo del pensamiento republicano cívico que abarca desde el MAQUIAVELO de los Discursos de la Primera Década de Tito Livio, pasando por las propuestas políticas republicanas clásicas en el ámbito de la educación: la francesa de ROUSSEAU y CONDORCET, la prusiana de FICHTE, HUMBOLT, NIETZSCHE, y la anglosajona de LOCKE, MILL y JEFFERSON, hasta llegar a la nueva elaboración y análisis del pensamiento republicano (Machiavellian Moment) más reciente realizado por J.A.POCOCK. Además, incorpora el estudio de los efectos de las ideas republicanos educativas francesas en el constitucionalismo histórico español y el contenido del derecho a la educación del artículo 27 de la CE 1978. El propósito es presentar la firme unión entre el pensamiento democrático republicano y la educación como derecho fundamental del desarrollo de la persona y, en particular, como mecanismo que confiere libertad y capacidad para participar en la actividad política de las comunidades democráticas. Educación y Estado democrático como dos realidades entrelazadas, en donde la plenitud de ambas, viene garantizada por una relación de reciprocidad continúa: educar en los valores democráticos y en la defensa de la ciudadanía y la vida política activa, implica la autoprotección y salvaguarda del Estado democrático -que genera ciudadanos democráticos activos, quienes en su actuación y devenir político fomentan, auspician y defienden la vigencia del sistema democrático-, y la garantía de legitimidad que supone la aceptación del soberano de la libertad civil en torno al imperio de la Ley y el principio democrático.